Escándalo en el Congreso: Millones para diputados en medio de baja productividad
Los diputados de la CDMX, cuyo mandato concluye el 31 de agosto, se han otorgado un escandaloso “bono de despedida” de 2.5 millones de pesos para cada uno, según informa el periódico Reforma. Este bono se dividirá en ocho pagos de 312,500 pesos cada uno. A pesar de tres años marcados por baja productividad, sesiones breves y escasos acuerdos, los legisladores lograron asegurar estos recursos durante la discusión del Paquete Económico en diciembre pasado, incluyendo un artículo transitorio en el presupuesto de egresos de 2024 para garantizar dichos fondos.
Los recursos comenzaron a fluir después del primer trimestre del año, directamente desde el gobierno central, sin pasar por el Congreso. Esta distribución ha generado conflicto, especialmente con el diputado Carlos Fernández Tinoco de la Asociación Parlamentaria Ciudadana, quien junto con la ex morenista y ahora panista Andrea Vicenteño, bloqueó las oficinas administrativas del Congreso en protesta.
La percepción pública sobre este “bono de despedida” es de indignación, considerando la falta de logros significativos de los diputados durante su gestión. La transparencia en la asignación y el origen de estos recursos también está en entredicho, aumentando las críticas hacia estos legisladores. En un contexto de austeridad y demandas ciudadanas por una gestión más eficiente y honesta de los recursos públicos, esta decisión resulta particularmente controvertida y cuestionable.
La acción de los diputados contrasta con las expectativas de los ciudadanos sobre el uso adecuado del presupuesto y deja una sensación de privilegio injustificado cuando muchas necesidades públicas siguen sin atenderse eficazmente.