El exnarcotraficante cumplió parte de su condena por tráfico de drogas y violencia, pero permanecerá en Estados Unidos bajo la custodia de ICE, sin ser deportado a México. 

El exlíder del Grupo Criminal del Golfo, Osiel Cárdenas Guillén, fue liberado esta mañana de una prisión federal en Terre Haute, Indiana, tras cumplir 17 años de reclusión. A pesar de haber sido sentenciado a 25 años en 2010 por cargos relacionados con tráfico de sustancias ilícitas y violencia contra agentes federales, Cárdenas Guillén ha sido entregado a las autoridades de ICE y permanecerá en Estados Unidos, sin ser deportado a México. 

Cárdenas Guillén, identificado con el número 62604-079 en la base de datos de la Agencia Federal de Prisiones, ya no aparece como recluso, y su estatus ha sido cambiado a “desconocido”. El ex criminal, quien supervisó el contrabando de miles de kilogramos de sustancias ilícitas sintéticas y más desde México hacia Estados Unidos, fue extraditado en 2007 y se mantuvo bajo custodia federal sin derecho a fianza. 

Además de su condena de 25 años, Cárdenas Guillén fue obligado a pagar una multa de 50 millones de dólares, una suma generada a partir de sus actividades ilegales. Su liberación ha generado controversia, especialmente considerando el impacto de su organización criminal en el tráfico de drogas en Estados Unidos. 

En 2023, su hijo, Osiel Cárdenas Salinas, fue condenado a nueve años de prisión por contrabando de armas de fuego, lo que subraya la continua influencia de la familia Cárdenas en actividades delictivas. La liberación de Osiel Cárdenas Guillén marca un punto crítico en la historia del narcotráfico en la región.