La Fiscalía Anticorrupción de Chihuahua notifica al exgobernador durante la sesión constitutiva del Senado, generando controversia y cuestionamientos sobre su elegibilidad.
En un giro sorprendente, la Fiscalía Anticorrupción de Chihuahua notificó este jueves al exgobernador Javier Corral sobre una nueva orden de aprehensión en su contra, justo cuando se disponía a ingresar a la sesión constitutiva del Senado para rendir protesta como legislador de Morena. La acusación se centra en su presunta responsabilidad por peculado agravado, un delito que habría cometido durante su mandato en Chihuahua.
A pesar de esta orden de aprehensión, Corral logró asumir su cargo como senador, una situación que ha generado controversia y críticas, especialmente desde las filas del PAN, que presentó una denuncia ante el INE solicitando que se declare su inelegibilidad como legislador.
Hace unas semanas, la fiscalía de Chihuahua intentó detenerlo, pero fue impedida por el encargado de despacho de la fiscalía capitalina, Ulises Lara, lo que ha alimentado aún más las tensiones políticas en torno a su caso. Corral, sin embargo, ha negado ser prófugo de la justicia, desestimando las acusaciones en su contra.
La situación de Corral como senador electo, mientras enfrenta serias acusaciones legales, pone en entredicho la integridad de las instituciones mexicanas y abre un nuevo capítulo en la batalla política que envuelve a la administración de justicia en México. Con la sombra de una orden de aprehensión sobre él, su futuro político y legal sigue siendo incierto y controvertido.