Se registran al menos 187 masacres de enero a junio, revelando una brutal realidad 

El presidente Andrés Manuel López Obrador insiste en su narrativa de reducción de delitos de alto impacto durante su administración, excepto en el caso de la extorsión. Sin embargo, los datos de la organización Causa en Común muestran una cruda realidad que desmiente los “otros datos” del mandatario. Durante el primer semestre de 2024, se documentaron 2,185 “atrocidades” en México, un promedio alarmante de 12 atrocidades y 27 víctimas diarias. Entre estos crímenes destacan 507 casos de tortura, 290 cercenamientos y 270 feminicidios con crueldad extrema. 

Además, se registraron al menos 187 masacres en todo el país, dejando al descubierto un panorama de inseguridad incontrolable. La investigación también revela la ejecución de 117 niñas, niños y adolescentes, con un promedio de 19 crímenes por mes, una cifra devastadora que contrasta fuertemente con las declaraciones triunfalistas del presidente. 

Los estados más afectados por estas atrocidades son Guanajuato, Jalisco, Guerrero, Baja California y Tabasco, regiones donde la violencia y la inseguridad siguen siendo el pan de cada día. Mientras López Obrador se jacta de una disminución en los homicidios, los números cuentan una historia diferente: su administración sigue siendo una de las más violentas en la historia reciente de México. 

El presidente mencionó en su conferencia del 16 de julio que la extorsión es una “asignatura pendiente” de su gobierno, pero la realidad es que la violencia en todas sus formas sigue siendo una asignatura reprobada. A pesar de los esfuerzos por maquillar los datos, los hechos y cifras presentados por organizaciones como Causa en Común exponen una verdad ineludible: México sigue sumido en una crisis de violencia que no muestra signos de mejorar bajo la actual administración.