Diputados de MORENA aceleran el proceso para desaparecer entidades clave. La oposición advierte sobre los riesgos de concentrar poder y debilitar los mecanismos de control democrático en México. 

Morena en la Cámara de Diputados ha acelerado el proceso para eliminar varios organismos autónomos, siguiendo los argumentos del presidente López Obrador sobre la necesidad de “racionalizar los recursos públicos” y destinarlos a políticas y programas sociales. Esta propuesta, respaldada por un dictamen de reforma constitucional, aún debe ser discutida en comisiones y votada por el Pleno de ambas cámaras. 

Entre los organismos en riesgo de desaparecer se encuentran: 

1. Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) 

2. Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) 

3. Comisión Reguladora de Energía (CRE) 

4. Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) 

5. Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) 

6. Consejo Nacional de Evaluación de Política de Desarrollo Social (Coneval) 

Según AMLO, estos organismos representan “más burocracia y gasto al erario público” y no son fundamentales para las políticas públicas, ya que en su mayoría no cumplen su propósito. Bajo este argumento, Morena planea avanzar con esta eliminación para el mes de agosto, antes de que los nuevos legisladores del Congreso de la Unión tomen sus funciones en septiembre. 

El dictamen avala la transferencia de las funciones de estos organismos a diversas dependencias del gobierno federal. Por ejemplo: 

– IFT pasaría sus funciones a la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes. 

– Coneval se integraría al Inegi. 

– INAI se transferiría a la Secretaría de la Función Pública. 

– CNH y CRE se unirían a la Secretaría de Energía. 

– Sistema de Mejora de la Educación se trasladaría a la SEP. 

Además, Pemex y la Comisión Federal de Electricidad podrían ser unificadas bajo la Secretaría de Energía al inicio del gobierno de Claudia Sheinbaum, quien asumirá la presidencia el 1 de octubre de 2024. 

Esta iniciativa ha generado preocupación sobre la independencia y eficiencia de las funciones críticas que estos organismos desempeñan, como la transparencia, la competencia económica y la regulación energética. La centralización de estas funciones en manos del gobierno central plantea riesgos significativos para la rendición de cuentas y la supervisión imparcial de los recursos públicos y las políticas del país. 

Con la mayoría calificada en el Congreso, MORENA y sus aliados tienen el poder necesario para impulsar estas reformas, lo que podría cambiar radicalmente el panorama institucional en México, afectando la vigilancia y el equilibrio de poderes en el país. La oposición y diversos sectores de la sociedad han manifestado su rechazo a estas medidas, advirtiendo sobre los peligros de concentrar aún más poder en el ejecutivo federal y debilitando los mecanismos de control y transparencia.